El Clausura es Amarillo

En un juego sumamente disputado y con un cierre emotivo, Unión volvió a coronarse campeón en el básquet hogareño al superar a Atenas, en su cancha, por 67 a 64 en el tercer partido final del Torneo Clausura. De esta manera, el próximo miércoles, en cancha de Gimnasia, habrá Súper Final para definir el campeón del año.

Lo de anoche era la última opción, había que tomarla o dejar que el 2016 se vaya sin títulos, y Unión lo hizo, se abrazó fuerte a esa última opción que le quedaba y se consagró, marche una nueva estrella.

El juego se vivió como una verdadera final, con más de mil personas en el estadio y un clima espectacular, fue el Griego quien tomo las riendas del juego desde el inicio, con un arranque furioso sacó la primera diferencia del juego (13-6) y se acomodó. Pero después del tiempo muerto de Navazo, Unión hizo su juego característico y recortó diferencias para que el primer cuarto finalice 18-16 en favor del local.

Para el segundo cuarto fue el Amarillo quien comenzó mejor, con el buen ingreso de De Marziani y el buen funcionamiento del perímetro pudo pasar al frente promediando el cuarto, pero no logró escaparse y Atenas tuvo un mejor cierre de primer tiempo, apoyados en Masson y la intensidad de Borrajo, para volver a tomar el control de las acciones e irse al descanso largo 33-31 arriba.

En el tercer cuarto los de Navazo fueron por todo, luego de un inicio irregular para ambos, una buena penetración de Bendel, un triple de García y 6 puntos seguidos de De Marziani pusieron una diferencia máxima de 7, con la que parecía que Unión tomaba el control del juego y podría llegar al último cuarto con tranquilidad. Pero los de Remaggi otra vez respondieron y recortaron a cuatro la diferencia para que, por primera vez en el partido, Unión llegue arriba al inicio de un cuarto, ahora 51-47.

Los últimos diez minutos se jugaron a dientes apretados, ninguno quiso regalarle nada a su rival, de esta manera Atenas volvió al frente con un rápido 5-0 a favor. De ahí en más, todo fue gol por gol, error por error.

Hasta que a falta de poco más de un minuto Unión sacó tres puntos, Masson recortó a uno con dos libres a falta de 40 segundos, Federico González volvió a estirar la diferencia a tres con una linda penetración por el eje y todo llevó al tiempo muerto de Remaggi con 17 segundos por jugar.

Este tiempo muerto pasó y cuando los jugadores se alistaban a hacer la salida de costado el trío arbitral decidió pedir tiempo por razones sumamente ajenas a lo que ocurría en el parquet. La salida no fue prolija, Unión defendió bien y el Rojo no pudo atacar como quería, por eso no pudo concretar y la pelota cayó en las manos de Bruno, quien rápidamente fue cortado con falta y en los tiros libres encestó los dos, puso las cosas 66-61 y parecía que todo terminaba ahí, pero Ciganek agarró la pelota y con un triple a la carrera le dio vida a su equipo. Otra vez la pelota a Juani, que ahora erró el primero, metió el segundo e interceptó el pase largo de la salida rival para darle fin a las acciones y desatar el festejo.

Síntesis:

Atenas (64): Pagella 8; Sesto 11; Borrajo 6; Couyoupetrou 6 y Masson 12 (F.I.);Ciganek 12; Lorda 9 (X); Disipio; Aude y Méndez.
DT: Oscar Remaggi.

Unión Vecinal (67): Bendel 11; González 16; Álvarez 5; García 16 y Bruno 9 (F.I.); De Marziani 10 y Winschel.
DT: Ignacio Navazo.

Parciales: 18-16, 33-31 (15-15), 47-51 (14-20), 64-67 (17-16).

Árbitros: Fabricio Vito – Maximiliano Cáceres – Martín Pietromónaco.

Estadio: Dante Demo, Atenas.