Juan Justo Epifanio: «Me siento un hijo de la familia de Unión»
Dialogamos con uno de los mejores bases que tuvo la historia del club, Juan Justo Epifanio. El oriundo de General Roca habló sobre su paso por la institución, los logros y todo lo que le dejó para su vida.
¿Cómo se dio tu llegada al club?
Mi llegada al club se dio en el año 2001. Luego de terminar la secundaria en el año 2000, tenía decidido ir a estudiar Contador Público a la UNLP. Para ese entonces venia entrenando como juvenil con el plantel de TNA del Club Deportivo Roca y a mediados de febrero del 2001 justo el Deportivo jugaba contra Gimnasia en La Plata. Yo había llegado hacía unos días a La Plata, así que Mario Spada (DT del Deportivo) me hizo el contacto con Fito Passaro, que era el ayudante de Gimnasia en ese momento, para ver si podía empezar a entrenar ahí. Estuve entrenando en Gimnasia un par de meses y en ese lapso se armó una pre-selección de juveniles de La Plata en donde cada club tenía que llevar 4 o 5 jugadores y desde Gimnasia me propusieron ir. Uno de los entrenadores de la selección era Santiago Rimoldi, y ahí fue donde comenzaron los nexos con Unión. Luego lo de Gimnasia no se dio, entonces Santiago me llamo a ver si quería ir a Unión y acepte.
¿Cómo te sentiste en tu paso por la institución?
Me siento un hijo de la familia de Unión. Para mi Unión en la Plata fue mi segunda casa. En el club crecí como jugador, pero sobretodo como persona. Hice muchos amigos y formé parte de grupos increíbles, de mucha calidad humana y deportiva.
¿Cuáles son los mayores recuerdos que te llevaste?
Los mejores recuerdos tienen que ver sobre todo con las amistades hechas y los momentos vividos. Obviamente que la frutilla del postre son los campeonatos, pero tengo la sensación de haber disfrutado mucho los procesos. Me refiero al proceso para llegar a los objetivos que nos planteábamos. Los entrenamientos, las comidas, los viajes, las salidas, todos esos eran momentos donde la pasábamos muy bien.
¿Por qué creés que consiguieron tantos logros?
Creo que los logros vinieron de la mano del buen trabajo realizado tanto por dirigentes, como de cuerpos técnicos y de jugadores. Dirigentes que a pesar de no contar con los recursos de otros clubes siempre le pusieron el hombro a la situación y se las arreglaron para poder llevar adelante las distintas competencias, muchos de ellos dejando muchas horas sus familias para dedicarlas al club. Cuerpos técnicos, con entrenadores y preparadores físicos capacitados, que permanentemente hicieron que fuéramos por mas, que nunca nos permitieron relajarnos. Y jugadores que siempre pusimos al equipo por encima de lo individual y a las persona por delante del jugador. Eso hizo que formemos grupos muy cohesionados, con objetivos claros y con gran capacidad para sobreponernos a las adversidades que se nos podían presentar.
¿Cuál dirías que fue el campeonato que más disfrutaste de ganar?
No fue un campeonato, fue un subcampeonato. Para mí el subcampeonato de la liga B fue el mayor logro deportivo. Todo el proceso de la liga B fue muy lindo. Éramos un equipo distinto a todos. La mayoría tenían jugadores de dedicación exclusiva al básquet. Nosotros en cambio era al revés. Muchos ya éramos jóvenes profesionales y otros estaban estudiando, así que durante el día ejercíamos nuestras profesiones o estudiábamos y a la noche entrenábamos. No teníamos el doble turno que tenían la mayoría de los otros equipos, pero eso lo suplíamos con un enorme amor propio por la camiseta. Con el correr de los partidos nos fuimos afianzando en la categoría y nos dimos cuenta que podíamos ir por más. Confiábamos mucho en nosotros. Y así fue, llegamos a la final con Bragado después de series tremendas con Villa del Parque y El Sureño. Terminamos jugando en el poli de Gimnasia a cancha llena y quedamos a un paso de ascender. Son momentos que van a quedar siempre en mi corazón.
¿Qué te llevó a volver en el 2015 y llevarte otro campeonato?
Me llamó Nacho (Navazo) para ver si quería empezar a entrenar y acepté. Después de la lesión de ligamentos cruzados en el Federal 2012/13 no había vuelto a jugar. Empecé entrenando, me sentí bien y decidí jugar. Fue un momento muy lindo, lo disfrute mucho y logramos los dos torneos, inclusive el primero sin la mayoría de los jugadores que estaban jugando el Federal en ese momento.
¿Qué recuerdo te queda del club al haber vuelto a Roca?
Tengo los mejores recuerdos de Unión. Mi mujer es platense, así que cada vez que vamos a visitar a la familia paso por el club. Lo llevo a mi hijo para que juegue un rato y yo aprovecho para saludar a los amigos que me quedaron. Para mí es un modelo de club a seguir.
¿Qué significó para vos compartir el club con tu hermano?
Obvio que significó muchísimo. Es una de las cosas más lindas que me tocó. Vivir momentos tan lindos y además poder compartirlo con mi hermano adentro de la cancha no tiene precio. Hasta el año pasado seguimos compartiendo equipo acá en el Deportivo Roca. Veremos este año que pasa.
Juan Carlos Allo "el Negro"
20 abril, 2020 (15:28)
Muchas son las cosas que tengo que comentar de Juan, que apenas llego al Club, integro el equipo de Juveniles, dirigido por Santiago Rimoldi, un plantel que al dia de hoy se reunen permanentemente, son alrrededor de 20 no quiero nombrarlos porque de alguno me voy a olvidar, son mas que amigos, hermanos, hay que verlos para creerlo, y Juancho, ya de entrada empezo a deslumbrar, les cuento cuando cumplio 19 años y mi hijo 18, lo festejron en el Club, mamita que de pibas y pibes de todos lados, la heladera era una Pelopincho en la puerta del Buffet llena de barras de hielo y alcohol del que quieras; otra cosa que lo pinta de lo que es fue, cuando Union salio Campeon Provncia en Necochea, me llama el Comisario y me aconsejo que nos fueramos de Necochea porque nos venian a pedrear la hinchada local, hablamos todos y decidimos irnos a Mar del Plata, la Policia nos custodio hasta pasar el puente, ya en el colectivo cantando y el griterio, del festejo, me llaman al celular y era Juancho desde Alemania, queriendo saber que habia pasado, demas esta que hablo con todos, y le hicieron sentir que el tambien estaba en el equipo; otro tema fue en uno de los viajes de la Liga B, cuando me llama Daniel Garcia Catenaro, y me dice quedate piola no llores y escucha, me comunico que ya estabamos clasificados para los Play Of, me lo como, pero no habran pasado 10′ , que Juan habia llevado una compu, y se entero, no se imaginan lo que fue ese Via Bariloche, que nos llevaba, creo que hera viajando a Puerto Madryn, donde en el partido el Cabeza Santiago Garcia, le tira de faja un caño al defensor y se manda solo hacia el aro,
que festejo despue a la noche, ni les cuento, la hinchada hera: Teresa, Victor, Cristina y yo que nos fuimos a cenar con los chicos, anecdotas con el gran Juancho tengo muchas, despues llego su hermano Hernan y por ultimo el mas atorrante de los 3 Marianito, que orgullo tener jovenes como los hermanos Epifanio en el Club, y la responsabilidad ante sus padres a quienes quiero mucho como al resto de su familia, de haberlos cuidado como nuestros, Juancho querido, hay que hacer un libro de los primeros viajes de la Liga B.
HORACIO RUIDIAZ
20 abril, 2020 (15:50)
Juan fue un gran jugador, pero en esta nota sobresale su don de gente. Se nota su ser «del interior», su simpleza, así jugaba. Sus palabras solo gratifican. Un abrazo grande a ese jugador que dio todo y a su hermano. Un orgullo.
María Teresa
20 abril, 2020 (22:48)
Gracias Negro!! Soy la mamá de Juan Justo. Estoy emocionada hasta las lágrimas. Ustedes fueron su familia cuando yo y su papá no podíamos estar físicamente. Eternamente agradecidos estaremos!!
Hernan Epifanio
20 abril, 2020 (22:55)
Negro y Horacio, voy a tomarme el atrevimiento de comentarles un poco en nombre de mis padres. Ahora que soy padre, puedo quizas imaginar lo que ellos sentian cuando regresaban en colectivo unas 15 hs de viaje luego de visitar a un hijo cuasi adolescente viviendo solo en un depto en busca de un titulo universitario. Fue sin dudas el deporte en general y Union en particular una de las pocas herramientas que probablemente hicieron que ese dolor en el pecho que probablemente sintieron se amionore aunque sea un poco. Es por eso que queremos que haya un Negro Allo sentado en cada tribuna , una familia Garcia a la vuelta de la cancha ( por solo citar algunos ejemplos) , en definitiva un Union Vecinal en cada rincon del pais.